Capítulo 18: Segunda oportunidad
El conductor se ha topadao con varios coches de policía que cortan la carretera. Lucía y él se miran angustiados.
- "Ya está"- le susurra Lucía al oído- aquí ha acabado nuestra huída. Este control lo han organizado para detenernos a nosotros. Ya no tenemos escapatoria.
Un policía sube por la puerta delantera e informa de que un camión cargado con materiales tóxicos ha volcado y continuar el viaje por esa carretera resultaría muy peligroso. Por eso, aconseja al conductor que retroceda un par de kilométros y que coja un maltrecho desvío. La carretera es muy vieja pero en esta ocasión es más segura que la carretera sinestriada.
Lucía no se lo puede creer. ¡Por segunda vez se ha librado de ir a la cárcel! Se recuesta de nuevo en los hombros del chico y sonrie. No sabe porqué pero está segura de que las cosas les van a ir bien a partir de este momento.
El traqueteo del autobús al atravesar la vieja carretera consigue que Lucía por fin se duerma. Aunque no podrá afirmar que sus sueños son tranquilos
- "Ya está"- le susurra Lucía al oído- aquí ha acabado nuestra huída. Este control lo han organizado para detenernos a nosotros. Ya no tenemos escapatoria.
Un policía sube por la puerta delantera e informa de que un camión cargado con materiales tóxicos ha volcado y continuar el viaje por esa carretera resultaría muy peligroso. Por eso, aconseja al conductor que retroceda un par de kilométros y que coja un maltrecho desvío. La carretera es muy vieja pero en esta ocasión es más segura que la carretera sinestriada.
Lucía no se lo puede creer. ¡Por segunda vez se ha librado de ir a la cárcel! Se recuesta de nuevo en los hombros del chico y sonrie. No sabe porqué pero está segura de que las cosas les van a ir bien a partir de este momento.
El traqueteo del autobús al atravesar la vieja carretera consigue que Lucía por fin se duerma. Aunque no podrá afirmar que sus sueños son tranquilos
0 comentarios